La cifra es escalofriante. En casi seis años -71 meses- se destinaron 2 billones 612 mil 800 millones de pesos a pagar los costos financieros de la deuda del sector público.
El monto, en pesos corrientes, representa el 45 por ciento de todo el presupuesto público federal recientemente aprobado por el Congreso para 2019.
Así que, entre diciembre de 2012 -cuando asumió la presidencia Enrique Peña Nieto- y octubre de 2018 -penúltimo mes de su mandato con cifras corrientes disponibles de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público- se erogaron 36 mil 800 millones de pesos mensuales en promedio; un monto similar al que se otorga anualmente a la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).
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Si bien los recursos que se destinaron a pagar los intereses, comisiones y gastos de la deuda pública, así como los costos del rescate bancario de 1994, son altos; la velocidad con la que crecieron en los últimos seis años preocupó a los analistas económicos.
La fuerte devaluación del peso frente al dólar, el alza reciente en las tasas de interés y el fuerte crecimiento en el endeudamiento público durante los primeros tres años del gobierno con Luis Videgaray al frente de la SHCP, fueron factores que dispararon el costo financiero de la deuda que compromete las finanzas públicas.
En los primeros 12 meses de la administración de Peña Nieto se destinaron 307 mil 799 millones de pesos del presupuesto público a pagar los costos financieros de la deuda. Pero en los últimos doce meses de su gobierno (entre noviembre de 2017 y octubre de 2018, para las que hay cifras disponibles preliminares) el monto se disparó a 599 mil 452 millones de pesos. Un crecimiento de 95 por ciento en términos nominales.
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Pero los costos financieros de la deuda amenazan con acelerarse por el incremento en las tasas de interés, aunque el principal de la deuda no se incremente en términos netos. Para el próximo año el gobierno federal estima un gasto de 749 mil millones de pesos en el costo financiero de la deuda pública, el 13% del total del presupuesto público. En 2013, era 9%.
Fuente: Arena Pública
