El costo financiero de la deuda pública de México, es decir, el pago en intereses, comisiones y otros gastos, aumentó 114 por ciento durante esta administración, alza que fue presionada por el aumento en las tasas de interés y la depreciación del peso frente al dólar.
De acuerdo con datos de la Secretaría de Hacienda, para 2018, el presupuesto aprobado para pagar el costo financiero de la deuda interna y externa del sector público es de 647 mil 480 millones de pesos (mdp), 114 por ciento más que el observado al cierre de 2012, cuando sumó 302 mil 294 mdp.
El incremento es superior al observado en el gobierno de Felipe Calderón, periodo en el cual creció 44 por ciento, y supera el monto de la deuda de estados y municipios al segundo trimestre del año (574 mil 781 millones de pesos), según Hacienda.
De 2012 a septiembre de 2018, la deuda neta del sector público pasó de 5.35 billones de pesos (32.6 por ciento del Producto Interno Bruto) a 10.37 billones (44.3 por ciento del PIB).
Lo anterior supone que cada habitante del país le tocaría pagar cuatro mil 872 pesos por los intereses y comisiones de la deuda nacional en este año.
El mayor impacto proviene del sector foráneo. De acuerdo con el secretario de Hacienda, José Antonio González Anaya, el costo financiero de la deuda externa equivale a 2.8 por ciento del PIB, el cual –reconoció– aumentó por el alza de los interés y la depreciación del peso.
Sin embargo, destacó que, pese a ello, se mantiene en niveles “razonables”, pues en Latinoamérica el promedio es de 4 por ciento del PIB, mientras que en países como Brasil e India es de 6 y 5 por ciento.
Flavia Rodríguez, directora de la consultoría Aregional, expuso que es cierto que la deuda de México y su costo de financiarla es manejable en comparación con otros países, pero también es cierto que en este sexenio subió se manera importante y que existe el riesgo de que la tendencia a la baja no se logre mantener en 2019.
La ventaja que tiene México, refiere el secretario de Hacienda, es que el país tiene un mejor perfil crediticio y una mejor calidad de deuda. De 1995 a este año, el porcentaje de la deuda en moneda nacional pasó de 20 a 76 por ciento, mientras que el vencimiento de menos de un año a más de ocho años.
Fuente: El Heraldo de México