Los retos que enfrenta el sistema de salud en México son enormes, el rumbo de sus finanzas apuntan hacia un posible estancamiento, el cual podría deteriorar el rumbo de nuestra economía.
De acuerdo con el centro de investigación del Instituto Mexicano de Competitividad (IMCO), el presupuesto destinado al sector salud se ubicó en el mismo nivel que en 2013 pero con 6.3 millones de mexicanos más.
Dicho estudio realizado por el Centro de Investigación Económica y Presupuestaria (Ciep), expone que el objetivo de crear un sistema de salud universal requiere de una amplia cobertura y financiamiento.
El IMCO aborda los puntos más relevantes de dicho estudio.
- Se estima que la proporción del gasto del Sistema Nacional de Salud (SNS) al sector público es del 53 por ciento, mientras que en el sector privado del 47 por ciento. Evidentemente la cobertura de atención no tiene la misma proporción, debido a que pocas personas tienen la capacidad económica de adquirir un servicio de salud privado.
- El gasto total de salud en México es muy bajo, al representar el 5.9 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB), en comparación con Canadá, Reino Unido, Suiza, Japón, y Francia, que dichos países destinan al sector salud entre el 9.8 y el 12 por ciento del PIB.
Hay más empleo, pero de baja calidad: CEESP
Gráfica CIEP
- El mismo estudio menciona que el IMSS, ISSSTE y el Seguro Popular concentran alrededor del 86 por ciento del total de población afiliada a algún programa de salud. Sin embargo, el IMSS y el Seguro Popular concentran más de 6 millones de afiliados.
Tabal con datos: CIEP
Las estadísticas demográficas del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), han mostrado que hoy en día la población mexicana está envejeciendo lo que coloca en un futuro cercano una perspectiva ampliamente costosa.
El estudio concluye que el sistema universal de salud en México será un gran reto para las actuales generaciones.
Fuente: Dinero en Imagen