Por: Noel Jiménez Camarillo[1]
Ante las presiones inflacionarias que vive el país, la Junta de Gobierno del Banco de México (Banxico) ha decidido incrementar el objetivo para la Tasa de Interés Interbancaria a un día, siendo una reacción muy natural y frecuente por parte del Banco Central, ya que su objetivo primario es mantener la estabilidad del poder adquisitivo de la moneda.
Es a partir de 2001 que Banxico adoptó formalmente el régimen de objetivos de inflación como marco de la política monetaria[2], es decir, utiliza las herramientas que están a su disposición para que la inflación tienda a converger a un cierto nivel; a partir de 2003, la meta permanente es de 3% (medida por la variación anual del INPC[3]).
Banxico tiene como prioridad controlar la inflación por las distorsiones que se pueden generar cuando aumenta de manera descontrolada. Altas tasas de interés reducen el poder adquisitivo de los agentes económicos[4]; en el caso de los trabajadores, ante el aumento de los precios, se reducen los bienes y servicios que pueden consumir, disminuyendo su calidad de vida; por otro lado, las empresas también se ven afectadas, reciben presiones de costos por el encarecimiento de sus insumos y, a su vez, no se arriesgan a invertir cuando los precios son inestables, por la incertidumbre que esto les genera.
Además, los procesos inflacionarios tienden a propiciar la desintermediación financiera[5], porque se incrementan los costos reales de los créditos, dejando a los deudores en una situación frágil, pues disminuyen su fortaleza para hacer frente a sus obligaciones, esto no solo afecta a las empresas y familias, sino también a los gobiernos (federales, estatales y municipales), complicando sus finanzas públicas para aquellos quienes tienen deuda con altas tasas de interés. El incumplimiento de estas obligaciones puede llevar a una moratoria general de pagos, afectando la estabilidad de todo el sistema financiero.
Por tanto, en escenarios donde la inflación se descontrola, y se presentan aumentos en los incumplimientos crediticios, y a su vez, aumentos en el riesgo de las instituciones financieras para otorgar nuevos financiamientos; la economía empieza a detener su marcha.
Para no llegar a una situación tan extrema, Banxico busca disminuir las presiones inflacionarias. Una de sus herramientas es la modificación del objetivo de la Tasa de Interés Interbancaria a un día, con la cual afecta las condiciones de liquidez en la economía. Como Banxico no puede controlar directamente los precios de los bienes y servicios, tiene que actuar a través de los mercados de dinero y de cambios.
El Banco Central puede influir en el comportamiento temporal de la tasa de interés, tanto las de corto como de largo plazo. El mecanismo podría describirse en términos simples como el ingreso o retiro de dinero en la economía, y con ello encarecer o abaratar el costo de éste, recordando que el costo del dinero es la tasa de interés.
Ante un aumento en el costo del dinero, las empresas verán restringidas sus posibilidades de inversión; las familias dejarán de contratar créditos personales, y los gobiernos no podrán acceder a créditos, porque el costo que les generaría comprometería sus finanzas públicas.
La tasa de interés y la inflación tienen una relación muy estrecha, Banxico debe de utilizar sus herramientas para disminuir las presiones inflacionarias, pero cuidando que las tasas de interés en el mercado no se disparen, de lo contrario el resultado sería contraproducente para la economía nacional.
Las opiniones expresadas en este artículo son de exclusiva responsabilidad del autor y no necesariamente representan la opinión del Grupo López-Elías.
Fuentes de información:
Banxico. Anuncio de Política Monetaria. Comunicado de prensa. Mayo 2022. México.
Banxico. Efectos de la Política Monetaria sobre la Economía.
Banxico. Programa Monetario 2022. Enero 2022. México.
[1] Lic. y Maestro en Economía por la UNAM y Analista Económico de Grupo López Elías.
[2] Banxico, Programa Monetario 2022, enero 2022, México.
[3] Índice Nacional de Precios al Consumidor.
[4] Agentes económicos: empresas, familias y gobierno.
[5] Proceso en el cual los agentes económicos tienen transacciones monetarias sin la intermediación de una empresa financiera (bancos, cajas de ahorro, casas de bolsa, etc.).